Se agrava la economía de comercios en Santa María

La acuciante situación económica no da tregua y comerciantes de diferentes rubros piden ampliación horaria para no perder su fuente de trabajo.

Las medidas que se toman para evitar la propagación del COVID-19 en Santa María son, para un sector de la sociedad, la muerte lenta de sus fuentes de trabajo.

Desde que comenzaron las medidas hasta la fecha, la situación se agrava más, y piden al Intendente Juan Pablo Sánchez, ser escuchados.

Es que durante todo el período de Etapa Amarilla, mientras en toda la provincia la actividad comercial en general fue casi normal, en Santa María el COE local tomó sus propias medidas.

Así fue que Santa María se quedó sin temporada turística, lo que afectó a los sectores ya golpeados económicamente, hoteles y restaurantes principalmente.

Luego, cuando se dio inicio a las clases presenciales, mientras en casi toda la provincia era normal, Santa María no era autorizada por el COE. De hecho, hubo solo 1 día de clases en el presente período lectivo. 

Uno de los sectores más golpeados es el gastronómico, ya que es al que apuntan a la hora de restringir, de hecho hoy mismo desde la provincia se emitió un Decreto obligando a cerrar sus puertas hasta el 26, utilizando solo la modalidad delivery.

Pero claro, las prohibiciones a largo plazo socavaron en los bolsillos y muchos de ellos no pudieron resistir.

Solo para nombrar a algunos, durante estos últimos meses cerraron sus puertas Bar Bistró, Comedor Lo de Montero, Comedor Yokavil, El Bohemio de Toray Herrera, Bar el Algarrobo, Restaurante Don Pablo, Sandwichería Retiro.

Algunos debieron cerrar sus puertas permanentemente, otros mientras duren las medidas. En ambos casos, son fuentes de trabajo que se perdieron, familias que necesitan trabajar, hogares con hijos que hoy no cuentan con sus necesidades básicas cubiertas.

Esta mañana, comerciantes reclamaron frente al municipio, esperanzados de que el Intendente Sánchez los quiera recibir, pero nada lograron.

Mañana, se espera una manifestación con comerciantes de todos los rubros, pidiendo poder trabajar. Será en Plaza Belgrano, a las 10.

Es que, tal como lo manifestó Rodolfo Reynaga en una entrevista brindada a este medio, los comercios no son una fuente de contagio, ya que cada uno respeta y cumple con los protocolos necesarios.

¡Nadie quiere contagiarse!, solo piden que no coarten su libertad para trabajar, poder llevar el pan a sus hogares, seguir viviendo de lo que saben y pueden hacer, enseñar con el ejemplo que la única salida es el trabajo, en definitiva, tener una vida digna.